AutorJet ExtramarCategoríaMariscosDeliciosas patas de potón frito crujiente con limón, un aperitivo de texturas, ideal para servir al momento y acompañar con una cerveza cerquita en una terraza al sol.
Las patas de potón frito son un aperitivo frito empanado que tiene un sabor exquisito y una textura crujiente muy gustosa.
A este aperitivo también se le llama “rejos de pota” o “espeluznaos”, nombre conque se ha bautizado a las patas de pota frita.
Aperitivo económico
Probablemente la patas de potón crujiente es uno de los aperitivos más pedidos en las terrazas del mediterráneo por su exquisito sabor. Normalmente se prepara utilizando patas de calamar, pero en esta oportunidad aprovecharemos las patas de potón Jet Extramar, una opción mucho más basta y económica.
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Patas crujientes
Luego de descongelar las patas de potón las cortaremos en grupos de tres a 4 trozos de patitas, así se freirán mejor y nos quedarán mucho más crujientes por fuera y jugosas por dentro.
Además utilizaremos harina especial para freír ya que este tipo e harina están pensadas para adherirse mejor a los mariscos y pescados creando una fritura crujiente y dorada.
Para que las patitas no formen una masa al momento de enharinarlas, las pasaremos por harina justo antes de freírlas y las sacudiremos un poco para quitarles el exceso de harina.
Después de estos tips, lograremos preparar unas patas de potón fritas perfectas, acompáñanos a preparar esta receta fácil, económica y deliciosa lista en quince minutos o menos.
Para optimizar tus tiempos de elaboración en la cocina descongela las patas de pota la noche anterior en la nevera. Utiliza un recipiente con rejilla para que los líquidos de la descongelación no modifiquen el sabor de los rejos de potón.
Una vez descongelados, pasa los rejos de potón en un recipiente hondo y los lávalos bajo un chorro de agua, quitaremos los excesos de líquido de la descongelación y sécalos con papel de cocina.
Corta las patas de potón con una tijera o un cuchillo en tres a 4 partes.
Sala los rejos de potón y pásalos por harina, hasta que las patas queden bien impregnadas.
Sacúdelas un poco para que salga el exceso de harina y no se formen grumos al cocinarlas.
Pon a calendar una sartén fuego alto, agrega el aceite y cuando humee un poco baja a fuego medio e incorpora las patas de potón enharinadas.
Fríe las patas de potón por aproximadamente un minuto medio o hasta que estén bien doradas.
Saca los rejos de potón de la sartén y déjalos que se escurran en un plato con un papel de cocina.
Sírvelos al momento en un plato blanco para resaltar los tonos dorados de las patas de potón crujiente y acompáñalos con un chorro de limón.
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Para optimizar tus tiempos de elaboración en la cocina descongela las patas de pota la noche anterior en la nevera. Utiliza un recipiente con rejilla para que los líquidos de la descongelación no modifiquen el sabor de los rejos de potón.
Una vez descongelados, pasa los rejos de potón en un recipiente hondo y los lávalos bajo un chorro de agua, quitaremos los excesos de líquido de la descongelación y sécalos con papel de cocina.
Corta las patas de potón con una tijera o un cuchillo en tres a 4 partes.
Sala los rejos de potón y pásalos por harina, hasta que las patas queden bien impregnadas.
Sacúdelas un poco para que salga el exceso de harina y no se formen grumos al cocinarlas.
Pon a calendar una sartén fuego alto, agrega el aceite y cuando humee un poco baja a fuego medio e incorpora las patas de potón enharinadas.
Fríe las patas de potón por aproximadamente un minuto medio o hasta que estén bien doradas.
Saca los rejos de potón de la sartén y déjalos que se escurran en un plato con un papel de cocina.
Sírvelos al momento en un plato blanco para resaltar los tonos dorados de las patas de potón crujiente y acompáñalos con un chorro de limón.
