AutorJet ExtramarCategoríaPescadosLos caracoles a la borgoñona son un plato tradicional de la gastronomía francesa, suelen servirse como entrante, cocidos y rellenos principalmente de mantequilla, ajo y perejil. Su sabor suave a molusco lo hace el inicio perfecto de un buen menú, por ello no dudes en incorporarlos en el tuyo.
Es de saber que no todos los caracoles son comestibles, en realidad existen muy pocos de estas especies y su sabor tiende a variar un poco entre unas y otras, es por eso que en especial este tipo de caracol es muy preciado.
Su preparación previa a la cocción suele ser bastante larga, pues para su debido consumo debe pasar por un proceso de limpieza y desinfección que permitan su consumo su poner en peligro la salud de tus comensales.
Como en Jet Extramar nos encanta facilitarte los procesos de preparación de tus comidas hemos traído para ti los caracoles cabrilla totalmente limpios y listos para ser cocinados, de esta forma podrás ofrecer platos de calidad preparados en menor tiempo.
Caracoles a la borgoñona, el entrante ideal de tu menú
Lo primero que haremos será cocer un poco los caracoles, para ello necesitaremos una cacerola con suficiente agua que pueda cubrir totalmente todos los caracoles. Allí colocaremos los 30 gramos de mantequilla, junto con las hierbas provenzales, y un toque de sal y pimienta negra junto al agua y los caracoles. Dejaremos hervir 12 minutos. Cuando estén listos colaremos y dejaremos reposar por al menos 20 minutos.
Una vez estén reposados procederemos a extraerlos de sus conchas y colocarlos en un bol grande. Las conchas deben reservarse para más adelante.
Procederemos a picar muy finamente los ajos, la chalota y el perejil, los colocaremos en el bol junto a los 200 gr de mantequilla. Sazonaremos con sal y especias, mezclamos muy bien hasta crear una pasta homogénea.
Tomamos las conchas de los caracoles, las cuales procedemos a rellenar con la pasta que hemos realizado. En cada concha ponemos una cucharadita de la pasta en el fondo, metemos el caracol y sellamos con otra cantidad de pasta.
En una bandeja refractaria colocaremos los caracoles rellenos, en este punto debemos cuidar que queden boca arriba para que no pierdan su relleno.
Una vez colocados todos los caracoles en la bandeja procederemos a espolvorear muy bien cada uno de ellos con pan rallado. Si tienes un poco más de mantequilla puedes derretirla y colocarle un chorrito por sobre ellos, les dará un toque especial.
Introduce la bandeja al horno (previamente calentado) por 10 minutos a 240° C.
Cuando los caracoles estén listos, retira del horno y sirve caliente.
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Lo primero que haremos será cocer un poco los caracoles, para ello necesitaremos una cacerola con suficiente agua que pueda cubrir totalmente todos los caracoles. Allí colocaremos los 30 gramos de mantequilla, junto con las hierbas provenzales, y un toque de sal y pimienta negra junto al agua y los caracoles. Dejaremos hervir 12 minutos. Cuando estén listos colaremos y dejaremos reposar por al menos 20 minutos.
Una vez estén reposados procederemos a extraerlos de sus conchas y colocarlos en un bol grande. Las conchas deben reservarse para más adelante.
Procederemos a picar muy finamente los ajos, la chalota y el perejil, los colocaremos en el bol junto a los 200 gr de mantequilla. Sazonaremos con sal y especias, mezclamos muy bien hasta crear una pasta homogénea.
Tomamos las conchas de los caracoles, las cuales procedemos a rellenar con la pasta que hemos realizado. En cada concha ponemos una cucharadita de la pasta en el fondo, metemos el caracol y sellamos con otra cantidad de pasta.
En una bandeja refractaria colocaremos los caracoles rellenos, en este punto debemos cuidar que queden boca arriba para que no pierdan su relleno.
Una vez colocados todos los caracoles en la bandeja procederemos a espolvorear muy bien cada uno de ellos con pan rallado. Si tienes un poco más de mantequilla puedes derretirla y colocarle un chorrito por sobre ellos, les dará un toque especial.
Introduce la bandeja al horno (previamente calentado) por 10 minutos a 240° C.
Cuando los caracoles estén listos, retira del horno y sirve caliente.
