AutorJet ExtramarCategoríaMariscos, SalsasLos muslitos de cangrejo rebozados con salsa rosada son una receta perfecta para cualquier cocinero profesional. Esta receta es fácil de preparar, ya que los muslitos de cangrejo ya están listos para freír y es una buena opción para ofrecer a los clientes un entrante único y especial.
Los muslitos de cangrejo rebozados con salsa rosada ofrecen un sabor suave y una textura crujiente, lo que los hace irresistibles. Esta receta es una excelente opción para cualquier cocinero profesional que quiera ofrecer un plato único y delicioso a sus clientes.
¡Aprende con Jet Extramar! Muslitos de cangrejo rebozados con salsa rosada
Si eres un amante del marisco, esta receta de muslitos de cangrejo rebozados con salsa rosada te va a encantar. Para ello, necesitarás los siguientes ingredientes:
En primer lugar, debes precalentar una sartén con abundante aceite y dejar que se caliente a 180 ºC.
Cuando el aceite esté bien caliente, fríe los muslitos sin descongelarlos. Es importante removerlos cada cierto tiempo para que se frían bien.
Para la salsa rosada, mezcla en un bol la mayonesa, el ketchup, el zumo de limón y una pizca de sal y pimienta. Remueve bien hasta que quede una salsa homogénea.
Una vez que los muslitos estén bien dorados, sírvelos aún caliente con la salsa rosada al lado y ¡listo para disfrutar!
Los muslitos de cangrejo geland son un producto muy versátil en la cocina. Son muy fáciles de preparar y su sabor suave y delicado combina a la perfección con diferentes salsas y preparaciones.
Anímate a probarlos en esta receta y sorprende a tus comensales con un plato delicioso y original.
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Ingredients
Directions
En primer lugar, debes precalentar una sartén con abundante aceite y dejar que se caliente a 180 ºC.
Cuando el aceite esté bien caliente, fríe los muslitos sin descongelarlos. Es importante removerlos cada cierto tiempo para que se frían bien.
Para la salsa rosada, mezcla en un bol la mayonesa, el ketchup, el zumo de limón y una pizca de sal y pimienta. Remueve bien hasta que quede una salsa homogénea.
Una vez que los muslitos estén bien dorados, sírvelos aún caliente con la salsa rosada al lado y ¡listo para disfrutar!
