Se define como una de las principales fuentes de proteínas para nuestro organismo; se habla de ella por ser un alimento rico en vitaminas y minerales; y se habla de ella como un ingrediente adecuado para dietas saludables que además está en nuestro día a día. Pero es que además, la carne de las manitas de cerdo de Jet Extramar se distingue por su delicioso sabor, a lo que hay que unir el amplio abanico de posibilidades de este producto para ser preparado de una y mil formas.
Y si a eso añadimos que es un producto primer precio, ¿no es este un ingrediente genial para esta estación invernal?
Ingredientes
– 3 manitas de cerdo partidas en dos trozos de Jet Extramar
– Chorizo
– 75 gr de jamón serrano en taquitos
– 6 cucharadas de tomate triturado natural
– Una cebolla grande
– Un puerro
– 3 dientes de ajos
– 2 zanahorias
– Una hoja de laurel
– Unos granos de pimienta
– Una cucharadita de pimentón dulce
– Una cucharadita de pimentón picante
– Azafrán natural molido
– Aceite de oliva virgen extra
– Agua y sal
Preparación
1. Limpiamos las manitas y las cubrimos de agua en una olla exprés. Añadimos sal y dejamos reposar durante veinte minutos.
2. Sacamos las manitas y las colocamos en otra olla. Encima, vertemos el caldo de la cocción, pasándolo previamente por un colador. Guardamos en la nevera.
3. Una vez vayamos a cocinarlas, ponemos al fuego la olla en la que tenemos las manitas de Jet Extramar, y, una vez la gelatina se transforme en un exquisito caldo, apartamos las manitas y seguimos calentando el caldo.
4. Utilizaremos una sartén con aceite de oliva para hacer el sofrito con la cebolla, el puerro, el ajo, la zanahoria y el laurel. Sazonamos.
5. Cuando esté pochado, agregamos el chorizo y el jamón troceados, rehogamos y añadimos el picante, el azafrán molido y el pimentón dulce.
6. Acto seguido, para que no se queme el pimentón, echamos el tomate triturado y los granos de pimienta. Rehogamos a fuego muy suave.
7. Añadimos las manitas, vertemos por encima el caldo de su cocción hasta que las cubra, rectificamos de sal si es necesario y dejamos cocer unos treinta minutos.
Una vez servido, tus comensales no querrán levantarse de la mesa.