Las patatas fritas son la tapa y complemento ideal para todo tipo de plato, así que si quieres aprender a preparar las más crujientes, sigue esta receta.
En primer lugar, vamos a lavar y pelar las patatas. Las secamos bien y cortamos en tiras de aproximadamente 1 cm de grosor y que de largo tenga unos 5 cm.
Ahora colocamos nuestras tiras de patatas en un recipiente y las remojamos en agua fría unos 15 minutos para que pierdan parte del almidón y no se peguen cuando estén en la freidora.
Sacamos las patatas del agua, escurriéndolas muy bien. Después agregamos la sal, mezclamos bien las patatas con las manos.
En una freidora o sartén ponemos a cocinar el aceite a unos 140 °C. Cuando estén en su punto incorporamos las patatas y dejamos cocinar unos 8 minutos.
Retiramos las patatas del fuego y dejamos reposar unos 10 minutos.
Ahora las volvemos a introducir en el aceite, pero esta vez calentado a 180 °C y dejamos freír hasta que estén doradas.
Por último, servimos en una fuente en compañía de nuestras bolsitas de kétchup para que los comensales puedan darle ese toque de sabor que solo este aderezo puede dar.